¿Cómo hacer un mapa mental sin estresarte?

Hacer un mapa mental es una gran alternativa si buscás una manera fácil y práctica de estudiar y memorizar el contenido de una determinada materia; pero no todas las personas saben qué es, ni lo útil que resulta este recurso.  

Por eso, si vos estás buscando forma divertida, fácil y creativa de aprender, llegaste al artículo correcto y solo tenés que seguir leyendo para saber todo lo que necesitas sobre esta herramienta de estudio que te cambiará la vida.  

 

¿Qué es un mapa mental? 

 

Se trata de un diagrama que te ayuda a organizar los conceptos, pensamientos o ideas de una forma creativa. Un mapa mental es un modo de organizar la información de tal manera que sea fácil de recordar para vos.  

Esta técnica inventada por Tony Buzan, un psicólogo y consultor educativo que se hizo famoso en los años 70’ gracias a sus métodos innovadores de aprendizaje, es muy poderosa si querés resumir al máximo la información y acordarte de un tema en específico.  

 

¿Cómo se hace un mapa mental? 

 

Podés hacer un mapa mental con papel, lápiz y colores, hacerlo en línea en plataformas como Canva o Figma, o podés hacerlo en una pizarra si tenés que estudiar en grupo y necesitás que todos lo vean. Pero lo más importante seguir el paso a paso.  

1. Definí tu idea principal: supongamos que estudiás un Bachillerato en Marketing y tenés un parcial sobre Kotler o los grandes mercadólogos. En este caso, podés hacer un mapa mental por cada uno de ellos y hablar de sus aportes. Sin embargo, para seguir con el mismo ejemplo, podés poner como palabra clave principal: Las fases de la mercadotecnia según Kotler. 
2. Desglosá la información: ya sabés que la idea principal son las fases de la mercadotecnia, así que ahora lo que tenés que hacer es ramificar cada una (así como si fuera un árbol o las patas de una araña) y explicar cada fase. Podés poner íconos o hacer un dibujo para recordar rápidamente cada una de ellas.  
3. Colocá ideas complementarias: por cada una de las ramas o patas de la araña, podés ir sacando ideas complementarias que te ayuden a organizar más la información y sirvan de complemento a la idea principal.  
4. Vinculá las ideas: cada una de las ideas debe tener una relación con la principal, así que debés usar flechas o líneas que den esa sensación de ramificación o de unidad.  

 

Con esos 3 pasos ya podés hacer un mapa mental sin estresarte, pero recordá que es importante ser conciso, que haya relación entre la idea principal, las secundarias y complementarias, que utilicés imágenes y colores para identificar cada una de las ideas y que elijás palabras que sean fáciles de recordar, ya que así será más fácil estudiar y aprender el contenido.  

 

Diferencias entre un mapa mental y un mapa conceptual 

 

Es probable que hayas escuchado sobre el mapa conceptual, pero son dos técnicas diferentes.  

El mapa conceptual también es un diagrama pero no utiliza imágenes ni busca transmitir la información de manera creativa, porque recurre más a las palabras y conectores para desarrollar un tema de forma jerarquizada.  

En cambio, el mapa mental, como ya lo hemos dicho antes, sí usa imágenes y la estructura puede ser más flexible y creativa. 

 

¿En qué casos puedo hacer un mapa mental? 

 

Tal como comentamos antes, podés hacer un mapa mental para estudiar, pero también hay muchos usos que podés darle:  

• Para organizar un plan de trabajo.  
• Para hacer una lluvia de ideas dentro de un trabajo creativo.  
• Para definir objetivos.  
• Para realizar el seguimiento de un proceso.  
• Para realizar una exposición.  
• Para tomar notas en la Universidad. 
• Para realizar una presentación de un producto o servicio en el trabajo.  

 

En fin, lo podés utilizar cada vez que necesités un apoyo visual que te permita recordar un tema.  

Leé también: Técnicas de estudio para tus exámenes 

 

Ejemplos de mapas mentales 

 

Si vos querés hacer un mapa mental, aquí te compartimos un video en el podés ver un ejemplo de cómo hacerlo.  

 

Ahora ya sabes cómo hacer un mapa mental, conocés para qué sirven y en qué casos podés hacerlo, ¿qué esperás para hacer uno?  

Recordá que es mediante el ensayo y error que el alumno se convierte en maestro, así que podés ir perfeccionando la técnica y con el tiempo se hará tan sencillo de hacer que solo te tomará unos pocos minutos tener listo tu mapa mental.  

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